Esto me lo encargó directamente la abuela de los niños para los que era la nube.
Me pidió que los nombres fueran en color verde, porque la gustaba a ella ese color, y también me pidió que llevara 2 niños jugando o algo así....
Y nada, me puse manos a la obra, y quedó chúlísimo.
La verdad es que el vidrio opaco, aunque puede no parecer vidrio al pronto, queda fenomenal una vez fundido. Tiene una suavidad tanto al tacto como a la vista, maravillosa.
Este fue el resultado. Como quedé bastante satisfecha (no en todos los trabajos me pasa), me explayé con las fotos.